“Nosotros no vamos a cubrir a nadie, hay un delito y si hay alguien involucrado en este delito se va a proceder”, señaló la presidenta Claudia Sheinbaum al ratificar el combate de su gobierno al huachicol y huachicol fiscal por la venta de gasolina y diesel ilegal en México.
Aunque las investigaciones, a cargo del Secretario Omar García Harfuch, todavía no revelan nombres de funcionarios, la Presidenta señaló que existen presuntos involucrados por la protección y complicidad con grupos del crimen organizado.
Se trata de dos fuentes de ingreso que ha beneficiado a la clase política de todos los partidos y en consecuencia tiene lazos profundos con Morena, con acusaciones graves a gobernadores y su dirigencia.
Para la Presidenta es un lastre que puede empezar a sacudirse con ayuda del superpolicía Harfuch, aunque políticamente puede significar un quiebre con parte de la clase política morenista que le ha apoyado, por lo que parece complicado que de verdad se llegue al fondo de las investigaciones.
El fracaso de Morena en Durango y Veracruz son otro llamado de atención que deberá considerar para las elecciones intermedias. Hay una batalla bajo la mesa que puede tener al huachicol como una arista de enfrentamiento político interno.
No sabemos hasta donde llegue pero puede significar un sisma que en un primer momento le reste poder a la presidenta, aunque en el largo plazo pudiera consolidarla frente al pueblo.